
Supersalud: inconsistencias en los reportes podrían estar afectando la entrega de medicamentos a millones de colombianos.
Redacción Salud
La Superintendencia Nacional de Salud ha revelado una preocupante disparidad en las cifras de deuda dentro del sistema de salud colombiano. Según el informe más reciente, los gestores farmacéuticos acumulan una deuda superior a $6,4 billones con la industria farmacéutica, mientras que las Entidades Promotoras de Salud (EPS) reportan obligaciones significativamente menores, por $852 mil millones.
El informe destaca que tres grandes gestores farmacéuticos concentran el 73,1 % de la deuda total con los laboratorios: Audifarma, Cruz Verde y Foscal. Esta diferencia en los reportes financieros ha generado una crisis que afecta directamente la entrega de medicamentos a los pacientes, especialmente aquellos con enfermedades crónicas.
Consecuencias para los pacientes y usuarios
La crisis financiera del sistema de salud ha generado un impacto directo en los pacientes, quienes enfrentan demoras en la entrega de medicamentos esenciales, especialmente aquellos con tratamientos de alto costo. Según datos recientes, 186.221 reclamos han sido registrados entre enero y abril de 2025 por problemas en la entrega de medicamentos, con las EPS Nueva EPS, Sanitas, Salud Total, Sura y Coosalud como las más señaladas.
Además, la falta de pago por parte de las EPS y gestores farmacéuticos ha llevado a que hospitales y clínicas limiten la prestación de servicios médicos, afectando la atención de urgencias y procedimientos especializados. En Santander, por ejemplo, clínicas y hospitales han advertido sobre el riesgo de cierre de servicios debido a la creciente deuda de Nueva EPS.
Acciones que deben tomar los organismos de control
Ante esta crisis, la Superintendencia Nacional de Salud ha instado a las EPS y gestores farmacéuticos a mejorar el flujo de recursos y reducir los costos de intermediación para evitar que la crisis financiera se convierta en una crisis de salud pública. El superintendente Giovanny Rubiano García ha enfatizado que garantizar la entrega de medicamentos no puede depender de relaciones contractuales desequilibradas.
Por su parte, la Contraloría General de la República ha revelado que 26 EPS acumulan una deuda total de $25 billones, de los cuales $11,3 billones corresponden a obligaciones con hospitales y proveedores de medicamentos. La entidad ha señalado que 16 EPS no cumplen con los indicadores financieros establecidos por la ley, lo que representa un riesgo para la estabilidad del sistema de salud.
El Ministerio de Hacienda ha confirmado que no hay recursos suficientes para sanear las deudas de Nueva EPS, lo que ha generado incertidumbre sobre el futuro de los afiliados. Ante esta situación, expertos han recomendado que el Gobierno implemente planes de contingencia para garantizar la continuidad de los servicios médicos y evitar el colapso del sistema.
La Superintendencia ha reiterado la necesidad de una solución estructural y urgente para estabilizar el sistema y garantizar el acceso oportuno a los tratamientos médicos. Mientras tanto, los pacientes continúan enfrentando dificultades para obtener los medicamentos que necesitan.