Escalada en Medio Oriente: Israel lanza ataques masivos contra Irán. La respuesta llega con ofensiva de drones y misiles
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Redacción MUNDO
Tel Aviv/Teherán – 15 de junio – El Ejército de Israel confirmó este domingo una “ola de ataques a gran escala” contra infraestructura militar clave en Irán, incluyendo instalaciones de la Fuerza Quds, la Guardia Revolucionaria y el Ejército iraní, así como múltiples centros de producción de armamento en Teherán y otras regiones estratégicas.
Según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), la operación —denominada “León Ascendente”— fue una respuesta directa a una ofensiva previa lanzada desde Irán, compuesta por más de 100 drones y misiles balísticos, la mayoría de los cuales fueron interceptados por sistemas de defensa aérea y unidades navales israelíes.
En represalia, Irán lanzó una contraofensiva que incluyó decenas de misiles balísticos y drones contra territorio israelí, en lo que calificó como el inicio de una “respuesta aplastante”. La Guardia Revolucionaria Islámica afirmó haber atacado “decenas de objetivos, centros militares y bases aéreas” en Israel. Aunque la mayoría de los proyectiles fueron interceptados, se reportaron explosiones en Tel Aviv y Jerusalén, con víctimas civiles y daños materiales.
El líder supremo iraní, ayatolá Alí Jameneí, advirtió que Israel enfrentará un “destino amargo y doloroso” y prometió un castigo severo. Por su parte, el presidente iraní, Masoud Pezeshkian, aseguró que si continúan las agresiones, la respuesta será “más fuerte y poderosa”.
Además, Irán ha activado su red de aliados regionales. Grupos como Hezbolá en Líbano, milicias chiíes en Irak y los hutíes en Yemen —todos respaldados por Teherán— han declarado que considerarán “objetivos legítimos” a las bases e intereses estadounidenses e israelíes en la región. Desde Yemen, los hutíes ya han lanzado misiles y drones hacia Israel, mientras que Hezbolá ha intensificado sus ataques en la frontera norte israelí.
Estados Unidos, aunque no participó directamente en la operación israelí, ha reiterado su apoyo a Israel y ha advertido a Teherán contra cualquier intento de ampliar el conflicto. El presidente Donald Trump declaró que Irán “no puede tener una bomba nuclear” y que se están realizando esfuerzos diplomáticos para evitar una escalada mayor.
